Sumergiéndose en el viaje
Sumergiéndose en el viaje de autodescubrimiento, María se adentró en lo desconocido con valentía. Cada paso en tierra extranjera era un desafío y una oportunidad de crecimiento personal. Las experiencias vividas la transformaban, nutriendo su espíritu inquieto y alimentando su curiosidad insaciable por lo nuevo y lo diferente.